Jesús nos enseña a evaluarnos antes de juzgar a otros. Podemos renovarnos y comenzar de nuevo.
Por: Pastor Hugo López, Diciembre 12, 2010

En la vida hay muchos puntos de partida. Nuestro nacimiento es el primero. ¿Recuerdas el día que inauguraste tu negocio o cuando te sentaste por primera vez frente a tu escritorio en el nuevo trabajo?, ¿recuerdas el día de tu matrimonio y el nacimiento de tu primer hijo? Todos esos momentos fueron puntos de partida, nuevos comienzos como empresario, trabajador, esposo o padre.
También hay unos inicios que nunca llegaron, oportunidades que desaprovechamos. Como el joven que había guardado los mandamientos pero no fue capaz de dejar todo para seguir a Jesús. Aprovechó el punto de partida para cumplir la Palabra y prosperó, sin embargo, no pudo ir más allá e iniciar nuevo comienzo porque exigía sacrificio. Muchos inicios exigen dejar algo. Cuando empezaste tu vida en Jesús sacrificaste todo lo anterior y te preparaste para recibir la salvación.