Durante la historia Jauja se resiste al cambio, hace cientos
años atrás era capital del Perú, perdió ese privilegio con el cambio a Lima.
En la actualidad debería
competir con las ciudades de américa latina y del mundo, y no
enfrentándose con las ciudades jóvenes de Junín.
Y ahora con sus protestas pasionales y violentistas hicieron
cancelar la licitación internacional de estudios técnicos para el nuevo
aeropuerto internacional en el valle del Mantaro.
En realidad Jauja tiene un paisaje maravilloso con la laguna
de Paca, su gente es esforzada, el
problema es que la religiosidad Romana
le impusieron paradigmas y tradiciones y creen que eso es su identidad.
No es tarde Jauja podría ser una de las ciudades innovadoras
y competitivas si su gente se sacude de todo lo que le ata al desarrollo.
